¿Qué dirías?
¿Desde dónde te vinculas cuando estableces relaciones?
Muchas personas que acuden a terapia tienen una forma de vincularse desde la necesidad en vez de la elección.
Desde ahí, es mucho más fácil caer en relaciones dependientes y disfuncionales, ya que no son selectivas con muchos aspectos de esa persona, de esa relación o de cómo se sienten con ambos aspectos, porque “le necesitan” y sólo el imaginarse sin esa persona o sin estar en esa relación, ya se les cae el mundo encima y aparece ansiedad y malestar.
Si te resuena lo que estás leyendo, vamos a hablar de algunos aspectos que pueden condicionar el funcionar desde la necesidad:
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Sociedad: la presión social por lo que a en pareja siempre se está mejor, por lo que sí a partir de cierta edad no tienes pareja es que algo “falla”, por lo que a nuestro entorno más cercano esté mayormente “emparejado”, etc.,.. La influencia que la sociedad en general ejerce sobre nosotrxs mismxs por lo que a lo que debería o no debería ser, puede ser un condicionante a la hora de necesitar estar con alguien, en vez de elegir.
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Cine: principalmente, con la idea del amor romántico representado en muchas películas.
En este sentido, la principal industria que lo fomenta, es Disney, y sus tramas de príncipes y princesas que ya desde pequeñxs, contemplamos como “lo ideal”.
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Autoestima: ésta está relacionada con nuestro autoconcepto, y éste con dos aspectos importantes sobre nosotrxs mismxs: el primero, ¿qué pienso sobre mi mismx? Y el segundo, ¿cómo me siento conmigo mismx? Si mi autoestima no está en un estado saludable, es muy probable que busque sentirse mejor a través de aspectos externos a mi propia persona, y, con frecuencia, el tener pareja, el que alguien esté pendiente de unx mismx, nos refuerce positivamente, etc., puede convertirse en necesario para “sentirse bien”.
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Entorno social pobre: cuántas veces he conocido personas que llenan con la pareja, la pobreza de su círculo social, ya sea necesitando estar con alguien, para poder hacer determinados planes, o ya sea, manteniéndose en una relación por no enfrentarse al “no quedarse solx”, ya que no se tiene un círculo social cuidado.