logotipo Núria Jorba
mi primera vez en la consulta

Mi primera vez en la consulta

COMPARTE ESTA ENTRADA

Entradas recientes

 

Seguramente nunca se te había pasado por la cabeza pedir hora en un centro de psicología porque pensabas que los problemas los podías resolver tu solo, sin ayuda. Pero pedir ayuda, aunque a veces nos cueste mucho, es muy sano. Pedir ayuda a nuestros amigos o familiares nos suele costar más o menos, pero pedirla a nivel profesional nos cuesta más.  Nos suele costar porque desconocemos, muchas veces, como trabajan los terapeutas y nos preguntamos cómo enfocarían un caso como el nuestro.

Para salir de dudas lo que podemos hacer, en primer lugar, es buscar por internet un centro el cual esté formado por buenos profesionales y con buenas referencias. Parece una tontería pero hoy en día todas las páginas web cuentan con opiniones y éstas nos pueden ayudar mucho a la hora de escoger un centro u otro, un profesional u otro. Está claro que la persona que escojas tiene que llamarte la atención por una razón u otra. Por su profesionalidad, por su reputación en su campo, por las opiniones favorables de la gente que, antes que tú, ha asistido a una terapia, etc. Y sobre todo es importante el “feeling”. Si un centro te llama la atención y no sabes por qué será positivo seguro. Somos energía y nos movemos por sensaciones así que por probar no pierdes nada porque el “no” ya lo tienes.

La primera vez que acudas a la terapia seguramente estarás nervioso porque no sabes exactamente como procederá el terapeuta y cómo enfocaréis la dinámica de la terapia pero a los pocos minutos deberías empezar a sentirte cómodo si es que la persona que está delante de ti te hace sentir así. Si se produce el efecto contrario, no te preocupes. No podemos conectar con todo el mundo así que si no te ha acabado de convencer, puedes indagar un poco más y contactar con otro centro y esta vez, antes de acudir, resuelve todas tus dudas por teléfono o por email. Cuéntales la experiencia que has pasado y remarca que no quieres que te vuelva a pasar.

El primer paso eres tú. Es tu decisión porque vas a emprender un camino de autoconocimiento en el que probablemente te sorprenderás. ¿Y por qué digo que te vas a sorprender? Porque el terapeuta, des de una visión totalmente neutral, te va a empezar a conocer, te va a orientar hacía el camino que quieras emprender y verás cómo empezarán a salir a la luz cosas que nunca hubieras imaginado, cosas que quizás pensabas pero no las decías en voz alta. En ningún momento deberías sentirte juzgado, al contrario, deberías sentirte apoyado porque el espacio que compartirás durante un periodo de tiempo será como un refugio en el que podrás ser tú mismo en esencia y en potencia.

Al cabo de unas sesiones deberías empezar a notar una mejoría en ti mismo. El tipo de terapia que resulta muy interesante es la terapia cognitivo-conductual ya que permite tratar la problemática a través de unos ejercicios que ayudan a cambiar los hábitos y conductas así como también se cambian los pensamientos, se redirigen hacia la positividad y se desdramatiza nuestro diálogo interior. Con estos ejercicios y con la terapia se consigue avanzar mucho más ya que te sentirás muy motivado trabajando para ti, para tus emociones, para tus pensamientos, para tus decisiones, etc. 

Te animo firmemente a que lo pruebes porque es una experiencia muy positiva. A veces nos cuesta mucho pensar en nosotros mismos y ya es hora de que nos empecemos a cuidar y a mimar un poco. No tengas miedo porque no hay nada que temer.

El orgasmo femenino

  Habitualmente no se habla de este tema, o al menos no de forma directa y sincera, siendo imprescindible hablar de ello. Dado que dependiendo

Leer más »

Tú, yo y nosostros

Algo que escucho de mis pacientes como terapeuta de pareja de forma constante en las sesiones es: nunca nos habíamos planteado que una relación se

Leer más »
Contacta con nosotros
Scroll al inicio